domingo, 28 de septiembre de 2008

Psicologia de un Infiel


La infidelidad es vivida como una de las peores traiciones que enfrenta la pareja y en general se piensa que el infiel es el culpable, sin embargo, la infidelidad es sólo el resultado de las crisis de pareja y ésta no es sólo sexual pues la pareja infiel buscará aspectos que su pareja no le brinda y estos pueden ser intelectuales, sexuales, físicos y emocionales.


El tema de la infidelidad, de los amantes o de las relaciones extraconyugales es uno de los puntos de partida para exaltar o desvirtuar a la familia y al matrimonio y actualmente en los comunmente llamados noviazgos.


La infidelidad es uno de los tantos síntomas que enfrenta la pareja en crisis y no puede explicársele desde un punto de vista causalista al igual que los celos , que pueden llegar al punto de enfermisos .


Desde el punto de vista "patológico", esta conducta lo será toda vez que sean conductas repetitivas y estereotipadas que impidan el desarrollo de la pareja y/o de cada uno de los cónyuges en su propia vida y en su relación.


Más que pretender hablar de la "crisis de la pareja" porque este tipo de conducta afecta a lo socialmente esperado, habría que concientizar a la población de que este tipo de procesos son comunes durante las crisis a las que toda vida está sujeta. A pesar de lo anterior, habría no obstante, que desempolvar las ideas "caducas" del amor socialmente esperado.


Respecto a la crisis de la pareja actual, que hay una incertidumbre acerca de lo que genéricamente el hombre debiera ser, pues éste se ha definido como lo opuesto a la mujer y al existir mujeres en lugares públicos (antes limitados a los hombres) son las mujeres muchas veces quienes sostienen a la familia, quienes ganan más, las de mayor escolaridad, las de mayor vida social, etc. Entonces la fuerte imagen del hombre preocupado por la vida pública y por realizar "las labores más importantes" se ve debilitada.


Sin embargo, hay que ver a la pareja como un sistema, en el cual de no cubrir las necesidades de sus miembros en el plano sexual, económico, de roles, de comunicación, etc., podrá darse algún tipo de relación extramarital que ponga su vida en peligro; pero, si a la inversa, vemos a la infidelidad como causa de una ruptura, perdemos de vista a la pareja como totalidad, porque la no satisfacción de los miembros puede traer como consecuencia no sólo la infidelidad, sino también la rigidez de los roles, la falta de comunicación, y lo más dañino, la violencia famililar.


Además, como ya se mencionó, en la elección de compañero operan no sólo factores conscientes y amorosos, sino también causas inconscientes y factores externos, los cuales influyen de manera efectiva en la decisión de hacer vida en común la cual no siempre puede ser tomada cuando la persona se haya consolidado como persona adulta y madura en toda la extensión de la palabra.